En InfoLegal sabemos lo desagradable que es que te despidan. Te afecta no sólo a nivel económico, sino también a nivel personal. Por eso, queremos ayudarte a conseguir las mejores condiciones de despido para ti.
Existen diferentes tipos de despido:
Despido objetivo
Cuando la extinción del contrato se da por causas ajenas al trabajador, ya sea por ineptitud a la hora de desempeñar sus tareas, la falta de adaptación a posibles cambios o por repetidas ausencias.
Dentro del despido objetivo están las causas imputables a la empresa, ya sean económicas, técnicas, organizativas, productivas o de fuerza mayor.
Despido disciplinario
Éste se da cuando el empleado ha tenido un comportamiento negativo como repetidas ausencias sin justificar, desobediencia, ofensas a un superior o un compañero, disminución intencionada de la productividad... Éste sería el caso de un despido procedente por lo que el trabajador sólo tendrá derecho a finiquito, no a indemnización.
Despido procedente
Este tipo de despido se da cuando existen causas justificadas para extinguir el contrato con el trabajador. Puede tratarse de un despido disciplinario o por causas objetivas. En el primer caso, siempre que la empresa consiga demostrar los hechos, el trabajador no percibirá indemnización, mientras que en el segundo supuesto, percibirá la indemnización estipulada por la Ley (20 días por año trabajado).
Despido improcedente
Se da cuando no existen causas para despedir al empleado o éstas no se pueden probar. En este caso, la empresa deberá pagar una indemnización de 33 días por año trabajado (45 días por los años trabajados antes de febrero de 2012) o readmitir al empleado.
Despido nulo
Un despido se considerará nulo cuando se demuestre que se realizó por razones de discriminación (sexo, raza, edad...) o con vulneración de derechos fundamentales (ejercer el derecho a huelga, estar embarazada...).
Si quieres saber qué derechos tienes, sólo tienes que llamarnos y nosotros te ayudaremos a reclamarlos.